La norma que sugiere el mantenimiento regular de tanques de almacenamiento es muy bien conocida, pero creemos que esta indispensable labor debe ser adoptada no únicamente desde una normativa, sino hacer que trascienda hacia un asunto cultural dentro de la industria.
Los cuidados y mantenimiento de los tanques de almacenamiento de agua pasa primeramente por un proceso de inspección continua, su drenaje, limpieza y desfinfección cada dos o tres años sirve para evitar grandes problemas de producción, el agua lo es todo.
Hay casos en los que los problemas de sedimentación están presentes, ante lo cual debe hacerse un lavado todos los años. El objetivo principal es evitar por todos lados la contaminación del agua y degradación de la estructura, y para lograrlo, debe estimularse y fomentarse una cultura referente dentro de la organización.
Facilitando el manejo y vigilancia
Una forma de facilitar la gestión del operador tiene que ver con las inspecciones y limpiezas periódicas, y dominio de los niveles desinfectantes de entrada y salida. Todo ello coadyuva a la reducción de potenciales líneas de agua sucia.
El tipo de estructura y sistema también ayudan a la eficiencia del mantenimiento de los tanques de agua. Por ejemplo, los sistemas de monitoreo constante son capaces de arrojar datos inmendiatos que alertan a los operadores sobre un incremento en la turbidez del agua, cloro residual, fluctuación, temperatura o cualquier otra actividad operacional, incluso labores in situ.
Los protocolos y productos precisos deben marchar junto a estos sistemas eficientes para garantizar un correcto mantenimiento de los tanques de almacenamiento de agua.
En Larkinven continuamos desarrollando estrategias prácticas y eficientes para lograr que más de nuestros aliados obtengan los recursos y la información adecuada para un óptimo manejo en el mantenimiento de los tanques de almacenamiento.